Una nanocarrera te garantiza trabajo bien remunerado en empresas de tecnología

  • Las nanocarreras son 20 programas especializados en tecnología de corto formato, que se pueden estudiar entre 6 y 12 meses y han sido diseñadas conjuntamente con Google, IBM, Facebook, Amazon y AT&T, con base en sus necesidades como empleadores.
  • Su creador Sebastian Thrun dejó su trabajo en Google y en la Universidad de Stanford para crear Udacity, una plataforma de cursos online denominados «nanodegrees»: un concepto que cambia la manera en que nos educamos.
  • La plataforma ya tiene más de ocho millones de estudiantes en todo el mundo y si el alumno no encuentra trabajo seis meses después de graduarse, se le regresa el pago de las mensualidades, el cual ronda los $125.000 al mes.
  • Para estudiar los cursos se necesita una buena conexión a internet y un inglés avanzado, aunque también hay algunos cursos disponibles en portugués, chino, japonés y español.
  • Udacity utiliza la inteligencia artificial para dar seguimiento de la actividad de los alumnos y conocer cómo podrían mejorar su participación y rendimiento.
  • La plataforma trabaja con más de 100 compañías que ya consideran los nanogrados al mismo nivel que los grados tradicionales.
  • Graduarse en una “nanocarrera” te promete obtener empleo muy bien remunerado en alguna empresa tecnológica, esto según los resultados de la compañía Udacity.
  • Según Thrun, la tasa de empleo de estos alumnos es de un 90%, mientras que el incremento medio salarial luego de estudiar en Udacity es de US$34,000 al año.
  • Más del 60% de estos alumnos terminan los cursos y obtienen el “nanogrado”, una credencial que no tiene valor académico, pero que es tanto o más valorada por la industria que un título oficial.
  • Una investigación de McKinsey Global Institute, refiere que desde el año 2020 hay en el mundo cerca de 100 millones de personas sin la preparación técnica que demandarán las empresas y 85 millones de trabajadores sin la formación necesaria para encajar en esos trabajos.
  • Países como Nueva Zelanda ya reconocen los nanogrados como máster.